- Violencia, indisciplina y relaciones con el crimen organizado lo pusieron bajo la mira
Ciudad de México.- Como si se tratara de una tragedia griega, la vida familiar de Julio César Chávez Jr conoce pocos instantes de paz. Conflictos sobre y bajo el ringo, derrotas cada vez más dolorosas en lo deportivo y personal y una espiral de malas decisiones tienen al “hijo de la leyenda” tocando la lona en todos los campos de su vida.
Julio César Chávez Jr. creció viajando con su hermano menor Omar, para ver las peleas de su padre.
“El Hijo de la Leyenda”, como se le llamaba en el ámbito boxístico, comenzó su carrera con un récord de 23-0 antes de un empate contra Carlos Molina en 2005.
Aunque Omar también peleó como profesional, “Julito” era más talentoso y ganó su primer título en 2009, en la división superpluma del Consejo Mundial de Boxeo Latino.
Pero el éxito vino acompañado de la tragedia, una situación que se repetiría de forma constante. Ese año, Chávez Jr. dio positivo por una sustancia prohibida después de su pelea con Troy Rowland en Las Vegas. Recibió una suspensión de siete meses en Nevada.
Un año después, ganó la corona vacante de los medianos plata del CMB, derrotando a John Duddy por decisión unánime.
El 4 de junio de 2011, Chávez Jr. alcanzó la cima de su carrera cuando ganó el título de los medianos del CMB, derrotando a Sebastian Zbik por decisión mayoritaria en el Staples Center de Los Ángeles.
Defendió exitosamente la corona tres veces: superó a Peter Manfredo Jr. por nocaut técnico, ganó por decisión unánime ante Marco Rubio y derrotó a Andy Lee, por nocaut técnico.
Pero llegó 2012 y la carrera de Chávez Jr. Comenzó a reflejar los excesos son los que vivía bajo el ring. El 22 de enero, la Patrulla de Carreteras de California arrestó a Chávez y lo acusó de conducir bajo los efectos del alcohol y las drogas, además de manejar sin licencia.
Ese año peleó contra Sergio “Maravilla” Martínez de Argentina, quien tenía 37 años en ese momento. El sudamericano venció al sinaloense por decisión unánime y el récord del mexicano quedó en 46-1-1.
Después de la pelea, Chávez fue suspendido por nueve meses y multado con 900 mil dólares por la Comisión Atlética del Estado de Nevada, a raíz de dar positivo por marihuana.
Tras la caída ante Martínez, Chávez tuvo dificultades para recuperar su forma anterior y peleó solo cinco veces en cinco años. Chávez tuvo otra oportunidad destacada en 2017 cuando peleó contra Saúl “Canelo” Álvarez en Las Vegas, batalla que perdió por decisión unánime.
El sinaloense pasó los siguientes tres años alejado del cuadrilátero y llamó la atención por videos en TikTok en los que acusaba a su padre de varias formas de abuso.
El 7 de enero de 2024, el Departamento de Policía de Los Ángeles lo arrestó y acusó de posesión ilegal de arma de asalto y fabricación o importación de un rifle de cañón corto. Por estos cargos, el Tribunal condenó al deportista.
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) explicó que Julio Chávez Jr. entró legalmente en el país en agosto de 2023, con un visado de turista B2 válido hasta febrero de 2024.
Por su parte, La Fiscalía General de la República confirmó que Chávez Jr contaba con una orden de aprehensión, desde marzo de 2023, por delincuencia organizada y tráfico de armas.
“Julito” había presentado una solicitud de estatus de residente permanente legal el año pasado en abril, dijeron las autoridades de EU, gracias a que está casado con Frida Muñoz, una ciudadana estadounidense, que según las autoridades estadounidenses “está conectada con el cártel de Sinaloa a través de una relación previa con el hijo ya fallecido de Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán”. El comunicado alude así a Édgar Guzmán Loera, asesinado en Sinaloa en 2008.
En una entrevista reciente, Chávez Jr. había expresado su indignación por la deportación masiva de migrantes emprendida por el Gobierno de Trump. “Yo soy de Sinaloa, donde las cosas están muy feas, y venir aquí, a un país tan bonito, con todo… y ver a Trump atacando a los inmigrantes, a los latinos, sin razón”.
Aseguró que “después de todo lo que ha pasado, no querría ser deportado”. Al final, ese temor se volvió decreto para lo que parece la última campanada dentro de su carrera profesional.
Chávez padre, el ídolo cuyo legado fue eclipsado
Julio César Chávez ha reconocido ser amigo de narcotraficantes, así como el rol de las drogas en su declive como boxeador.
Durante una entrevista que ofreció en 2021, confesó que en la década de los años noventa fue invitado a una reunión privada a la que también asistieron Joaquín “El Chapo” Guzmán, Ismael “El Mayo” Zambada y los hermanos Arellano Félix.
“Conozco a todos los narcotraficantes”, dijo en ese entonces. Según su relato, todo ocurrió tras su triunfo contra Héctor “Macho” Camacho; y es que, aseguró, era mandado llamar por estos hombres, pues querían conocerlo: “Cuando yo me coroné campeón del mundo yo era su ídolo, me mandaban llamar y si no iba… ¡me llevaban! Llegaban camionetas llenas de gente armada: ‘oye, te quiere conocer el patrón’”, agregó.
El sinaloense explicó que si nunca rechazó una invitación fue por no ponerse en peligro, ya que un desaire podía tomarse como una falta de respeto. “Mejor hacer amigos que enemigos”, expresó.
Claudia pide a EU colaboración en seguridad
Ante el caso de Ovidio Guzmán, hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera, que se lleva en Estados Unidos, la Presidenta Claudia Sheinbaum, comentó que, al ser extraditado, por lo menos las autoridades estadounidenses deberían tener comunicación con la Fiscalía General de la República (FGR).
Lo anterior se debe a que la Fiscalía de Nueva York retiró oficialmente los cargos contra Ovidio Guzmán, hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera, para que el caso se concentre en una sola jurisdicción, Chicago, luego de que el acusado dijera que se declarará culpable de las imputaciones de narcotráfico en su contra.
Sheinbaum lanzó una serie de preguntas sobre las acciones de la Fiscalía de Nueva York contra el narcotráfico mexicano: “¿Qué ha dicho el gobierno de Estados Unidos con relación a organizaciones terroristas? ¿Y qué está haciendo ahora?”.
“Este caso en particular fue una detención que hizo el Gobierno de México. Durante esa detención fallecieron soldados mexicanos y se extraditó. Entonces, todavía se está concentrando en un juicio, pero vale la pena hacer esa pregunta”, dijo.
En ese sentido, Sheinbaum Pardo aseguró que no están defendiendo a nadie ya que no se trata de eso, pero pidió recordar la violencia que se vive en Sinaloa. “Porque hay que recordar el conflicto de Sinaloa, cómo surgió. Entonces, por eso es importante para nuestro país. Y nosotros, por supuesto que combatimos al crimen organizado, a la delincuencia organizada”.