- Los manifestantes insistieron en que el campo y el transporte «están al límite», además de que sufren riesgo económico por los precios injustos
Ciudad de México.- La madrugada del miércoles, transportistas y productores del campo informaron que fracasó otra mesa de negociación con el gobierno federal en la Secretaría de Gobernación (Segob), por lo que este jueves se mantienen bloqueos de carreteras en distintos puntos del país.
Luego de no obtener una respuesta a sus peticiones, los campesinos y transportistas acusaron «vaciladas» de los funcionarios federales.
No descartaron cerrar todos los accesos a la Ciudad de México y otros lugares de los estados «a partir de ya, lo vamos a valorar», dijo David Estévez, presidente de la Asociación Nacional Transportista A.C., (ANTAC).
Externaron además su preocupación porque se puede dar una «intervención» del Ejército y que haya represión contra su movimiento:
«Se me hace un despropósito lo que nos estuvieron proponiendo y planteando (…) Dos preocupaciones: una, la gran afectación que se está haciendo a la economía nacional, y, por otro lado, la preocupación de que vaya a haber una intervención del Ejército y las policías y haya una represión en contra del movimiento; están preparando el camino», dijo este miércoles Eraclio Yako Rodríguez, líder del Frente Nacional para el Rescate del Campo Mexicano.
Dejaron la puerta abierta a más mesas de diálogo con autoridades del gobierno federal, pero con «soluciones reales».
Entre las demandas de seguridad en las carreteras, exigieron además la presentación con vida de Hugo Contreras, chofer de tráiler desaparecido que se dirigía de Veracruz a Córdoba.
Más tarde asistieron al Senado de la República y a la Cámara de Diputados «en busca de soluciones» en otros temas como la Ley de Aguas.
Insistieron en que el campo y el transporte «están al límite», además de que sufren riesgo económico por los precios injustos y las tarifas que no cubren costos, lo que afecta el sustento de miles de familias.
Expusieron que la soberanía alimentaria que promueve el gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo está en peligro ante la falta de apoyo, lo cual compromete la producción de comida propia.
Denunciaron también que son víctimas de la delincuencia organizada, de las extorsiones y los asaltos en carreteras.
